Carlos Pablo Cocciolo

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viernes, 8 de mayo de 2020

Titulo del trabajo. TRADICION Y COCINA "COMO AGUA PARA CHOCOLATE" de Laura Esquivel


Titulo del trabajo. TRADICION Y COCINA

COMO AGUA PARA CHOCOLATE de Laura Esquivel

 

Índice

 

Marco teórico ………………………………………………..3

 

Desarrollo……………………………………………………..5

 

Conclusiones…………………………………………………..

 

Bibliografía……………………………………………………


 

MARCO TEÓRICO

 

El presente trabajo es un análisis que toma en cuenta  la teoría bajtiniana de los géneros discursivos, que afirma que los géneros son estructuras relativamente estables, relacionados con diferentes esferas sociales y actividades sociales.

Las formas del uso de la lengua oral y escrita son tan diversas como lo son estas áreas de actividades humanas. Sin embargo, conservan modelos estables lo que BAJTIN denomina enunciados concretos o emisiones lingüísticas de cada hablante.

Entonces para cada actividad humana surgirá una necesidad de discurso con sus características propias para ser funcional a dicha comunicación.

El género discursivo es un conjunto de textos que identificamos por su estructura y contenido y que nos permite distinguir, a simple vista, un cuento de una novela, de una carta, de una receta o de una declaración jurada o una prescripción médica. Afirma Bajtín: “El género discursivo es una serie estable de enunciados del lenguaje que son agrupados pues tienen ciertas similitudes en su contenido temático, en su estilo verbal y en su estructura y composición” [1]

Por otra parte, se observarán distintos discursos sociales puestos como recurso de estilo en la narratología contemporánea hispanoamericana (específicamente en una novela mexicana) y su impacto para  generar rupturas y experimentación.

Todo estilo está indivisiblemente vinculado con el enunciado, cada esfera de la comunicación discursiva es individual, y por lo tanto puede reflejar, evidenciar la individualidad (concepto que marida con el de personalidad), es decir, puede poseer un estilo propio, individual, personal y por lo tanto, único del usuario. Los enunciados son reflejo de la individualidad del hablante. [2]

 

El análisis de la novela selecta es de la autora Laura Esquivel COMO AGUA PARA CHOCOLATE (1989) en donde se mostrará  la individualidad de un hablante, el estilo del discurso, la pluralidad de géneros surgida desde  las diferentes necesidades humanas de comunicación.

 

 


 

DESARROLLO

La novela selecta se centra en  la historia de un “amor imposible”, el de los  personajes  Tita y Pedro. Tita es la hija menor de Mamá Elena y está, por tradición local, destinada a permanecer soltera para encargarse del cuidado de su madre hasta su muerte.

En voz autoritaria y bajo el formato de órden la madre expresa a Tita:

Desde ahora te vas a encargar de los preparativos para el banquete y cuidadito que yote vea una mala cara o una lágrima, ¿oíste? (Esquivel: 7)

En un dialogo entre Rosaura y tita, donde la rivalidad entre hermanas se hace evidente en toda la novela,  observamos la presencia de esas tradiciones locales, que no son más que discursos sociales

Tú tuviste un novio indebidamente. No te correspondía tenerlo.

—¿Según quién? ¿Según mamá o según tú?

—Según la tradición de la familia, que tú rompiste.

—Y que voy a romper cuantas veces sea necesario, mientras esa maldita tradición no me tome en cuenta.  (Esquivel: 61)

Tita es criada por Nacha, la cocinera de la casa prácticamente en la cocina, que es el espacio, es decir el topoi, que elige la autora. Los hechos transcurren especialmente en la cocina, espacio de un saber, de un saber sentir, de un saber crear

Tita es identificada como “la cocinera” y desde ese rol, impuesto por la tradición construirá el centro de la narración

Tita era el último eslabón de una cadena de cocineras que desde la época prehispánica se hablan transmitido los secretos de la cocina de generación en generación y estaba considerada como la mejor exponente de este maravilloso arte, el arte culinario.

(Esquivel: 13)

Esta situación trae como consecuencia que ella sea una excelente conocedora de los secretos de la cocina.  Tita, además, demuestra desde una temprana edad un sesgo de niña creativa, poseedora de inteligencia mixturada con un carácter dulce pero a la vez firme lo que la lleva a destacarse en todo lo que ella hace.

Sin embargo, su madre reprime su espíritu libre por ejemplo, impidiéndole casarse con Pedro, a quien Tita ama apasionadamente. Y en esta arbitrariedad de mandatos sociales la hija Rosaura ocupa el lugar de sustituta. Cuando Pedro declara su amor a Mamá Elena, ella no sólo le niega la autorización al casamiento sino que le ofrece la mano de su otra hija, la mayor, Rosaura. Pedro acepta la propuesta de casarse con ella a pesar de no estar enamorado, solamente por permanecer cerca de Tita, quien siente desgarrársele el corazón.

Lo que Rosaura no sabía, aunque lo sospechaba, era que Pedro amaba a Tita con un amor inconmensurable. (Esquivel: 9)

La historia del personaje principal está narrada en doce capítulos en clave gastronómica:

I Enero Tortas de Navidad INGREDIENTES: 1 lata de sardinas ½ chorizo 1 cebolla orégano 1 lata de chiles serranos 10 teleras Manera de hacerse:  (Esquivel: 1)

II. Febrero Pastel Chabela INGREDIENTES: 175 gramos de azúcar granulada de primera 300 gramos de harina de primera, tamizada tres veces 17 huevos Raspadura de un limón Manera de hacerse: (Esquivel: 5)

En estos dos fragmentos observamos la receta tradicional como género discursivo que enmarca en la historia, y le dará la estructura capitular e inicio narrativo, este recurso se da en toda la novela, con lo cual también advertimos que el transcurso de la historia es en el lapso de un año, de doce meses.

III. Marzo. Codornices en pétalos de rosas INGREDIENTES: 12 rosas, de preferencia rojas 12 castañas 2 cucharadas de mantequilla 2 cucharadas de fécula de maíz 2 gotas de esencia de rosas 2 cucharadas de anís 2 cucharadas de miel 2 ajos 6 codornices 1 pithaya Manera de hacerse: (Esquivel: 13)

En el capítulo 3 se observa la presencia del elemento rosa, que en el plano de la historia realza el caráter “romántico”, aquí hará gala el erotismo.

IV. Abril . Mole de guajolote con almendra y ajonjolí INGREDIENTES: ¼ de chile mulato 3 chiles pasilla 3 chiles anchos Un puño de almendras Un puño de ajonjolí Caldo de guajolote Un bizcocho (de concha) Cacahuates ¼ cebolla Vino 2 tablillas de chocolate anís manteca clavo canela pimienta azúcar semilla de los chiles 5 dientes de ajo Manera de hacerse:    (Esquivel: 19)

V. Mayo . Chorizo norteño INGREDIENTES: (Esquivel: 25)

En el capítulo  V el elemento chorizo puede interpretarse como alegoría del falo. Aquí los hombres se haen presentes de forma agresiva.

VI. Junio. Masa para hacer fósforos INGREDIENTES: (Esquivel: 31)

VII. Julio . Caldo de colita de res INGREDIENTES: (Esquivel: 35)

Aquí se puede interpretar el elemento fósforo como el elemento de la pasión, del fuego. El elemento fuego dará pie al capítulo 12 donde el fuego consagra a los amantes, un fuego eterno, en sintonía con las tradiciones.

VIII. Agosto. Champandongo (Esquivel: 42)

IX. Septiembre. Chocolate y Rosca de Reyes INGREDIENTES: (Esquivel: 53)

En este capítulo se marca el rito social de los reyes, la llegada de personas para festejar un rito.

XI. Noviembre. Frijoles gordos con chile a la Tezcucana INGREDIENTES  (Esquivel: 60 )

XII. Diciembre. Chiles en nogada INGREDIENTES: (Esquivel: 66)

Cada capítulo representa un mes del año calendario y explicita una receta diferente que, al mismo tiempo, nos informa oportunamente los cambios de sentimientos y  vaivenes interiores de la protagonista principal, sus angustias, sus decisiones, sus semblanzas.

Mientras Tita daba forma a las tablillas, añoró con tristeza los días de Reyes de su infancia, en los que no tenía problemas tan serios. Su mayor preocupación en esa época era que los Santos Reyes nunca le traían lo que ella pedía, sino lo que Mamá Elena pensaba que sería lo más adecuado para ella. (Esquivel: 48)

Las emociones de Tita aparecen en la cocina, el topoi de la novela.

Tita batía y batía con frenesí, como queriendo terminar de una vez por todas con el martirio. (Esquivel: 8)

EL carácter formulaico de todos los  capítulos está en sintonía con las órdenes que recibe todo el tiempo tita de su madre.

Pero no podía evitar la tentación de transgredir las fórmulas tan rígidas que su madre quería imponerle dentro de la cocina... (Esquivel: 58)

La explicación detallada de cómo se prepara una determinada receta por parte de la narradora da marco a la otra narración, la de la historia central por asociación amalgamando magistralmente determinadas características propias de los diferentes géneros discursivos elegidos e involucrados con sus diferentes tramas.

La novela así alterna entre recetas y narración

No era fácil para una persona que conoció la vida a través de la cocina entender el mundo exterior. (…)Hay que tener cuidado de freír el chorizo para las tortas a fuego muy lento, para que de esta manera  quede bien cocido, pero sin dorarse excesivamente. En cuanto está listo se retira del fuego (Esquivel: 2)

 La narración se inicia desde la instrucción de la receta, con el clásico género discursivo receta de cocina.

Las nueces se deben comenzar a pelar con unos días de anticipación, pues el hacerlo representa un trabajo muy laborioso, que implica muchas horas de dedicación. Después de desprenderles la cáscara hay que despojarlas de la piel que cubre la nuez. Se tiene que poner especial esmero en que a ninguna le quede adherido ni un solo pedazo, pues al molerlas y mezclarlas con la crema amargarían la nogada, convirtiéndose en estéril todo el esfuerzo anterior. Tita y Chencha terminaban de pelar las nueces, sentadas alrededor de la mesa del comedor.  (Esquivel: 66)

Discursividad que da cuenta de la nulidad de Tita a la hora de tomar decisiones, las construcciones en este tipo textual se hacen desde la impersonalidad en el uso de las oraciones impersonales con se y hay.

También se sucenden otros géneros discursivos como el refrán que da cuenta de las tradiciones.

Entonces Mamá Elena decía:

—Por hoy ya terminamos con esto.

Dicen que al buen entendedor pocas palabras,así que después de escuchar esta frase todas sabían qué era lo que tenían que hacer. (Esquivel: 3)

—Nada, mami.

—A mí no me engañas, cuando tú vas, yo ya

fui y vine, así que no te hagas la mosquita muerta. (Esquivel: 12) (negritas mías)

Cada capítulo finaliza con la expresión Continuará que marca un relación con los géneros fílmicos

Continuará

Siguiente receta:

Pastel Chabela (de Boda) (Esquivel: 6)

El escenario del erotismo comienza en el capítulo 5,

Parecía que el alimento que estaba ingiriendo  producía en ella un efecto afrodisíaco, pues empezó a sentir que un intenso calor le invadía las piernas. (Esquivel: 15)

El erotismo hace eco en todas las partes del cuerpo.

Para entonces el olor a rosas que su cuerpo

despedía había llegado muy, muy lejos. (Esquivel: 16)

El erotismo se inscribe relacionado con el arte culinario El compartir el alimento elaborado,  abre un escenario de seducciones que se manifiesta en todas los rincones del cuerpo, en todos los órganos.

Si bien son las miradas, las que mejor marcan esos placeres que marca las escenas eróticas:

Tita levantó la vista sin dejar de moverse y sus ojos se encontraron con los de Pedro.  (Esquivel: 6)

El erotismo no es más que un juego, un juego del deseo

Y así como un poeta juega con las palabras, así ella jugaba a su antojo con los  ingredientes y con las cantidades, obteniendo resultados fenomenales. Mientras recibía un beso en la boca, la mano de Pedro, tomando la suya, la invitó a recorrerle el cuerpo. Tita tímidamente palpó los duros músculos de los brazos y el pecho de Pedro. Más abajo, un tizón encendido, que palpitaba bajo la ropa. Asustada, retiró la mano, no por el descubrimiento, sino por un grito de Mamá Elena. (Esquivel: 29)

El erotismo recorre toda la novela, las corporeidades.

Si bien en el nivel de la Historia se inscribe el relato de una historia principal de desdicha amorosa que tiene como protagonista a Tita y su familia, los juegos del deseo se enquistan, se liberan.

La muerte de la madre marca ese juego de eslabones entre historias pasadas y repeticiones en el presente, así como las recetas, que son del pasado y se repiten en el presente:

Durante el entierro Tita realmente lloró por su madre. Pero no por la mujer castrante que la había reprimido toda la vida, sino por ese ser que había vivido un amor frustrado. Y juró ante su tumba que ella nunca renunciaría al amor, pasara lo que pasara. (Esquivel: 41)

Aquí se menciona otro tipo de género discursivo “el juramento” como parte de una tradición social, local.


 

Conclusiones

 

 

La narración está en tercera persona, Sin embargo aparece la ausencia de narrador en un  tipo de texto instructivo

Las sanguijuelas se ponen dentro de un vaso con medio dedo de agua, por espacio de una hora. La parte del cuerpo donde se van a aplicar se lava con agua tibia azucarada. Entre tanto se colocan las sanguijuelas en un lienzo limpio y se cubren con él. (Esquivel: 33)

Este recurso convierte la novela como en una novela de ruptura, dos tipos textuales se encuentran: la instrucción y la narración.

Por lo tanto, el discurso del narrador desde el  presente contempla una delicada mixtura entre diferentes géneros  discursivos como lo son el género literario y el instruccional.

La función poética del primero, la función apelativa del segundo, aparecen atravesados por una trama narrativa/descriptiva locuaz sabiamente imbricadas.


 

Notas

[1] Para el análisis y abordaje de los géneros discursivos se abordó al teórico M. Bajtin y las clases dadas en la cátedra

[2] Para el estudio y comprensión del denominado “período de las vanguardias artísticas” sigo a Hugo Verani en Las vanguardias literarias en Hispanoamérica (manifiestos, proclamas y otros escritos).

 

Bibliografía

 

Bajtin, Mijail: El problema de los géneros discursivos, México: Siglo XXI, 1989.

Verani, Hugo: Las vanguardias literarias en Hispanoamérica (manifiestos, proclamas y otros escritos), México, FCE, 1995.

Laura Esquivel: Como agua para chocolate. Ciudad autónoma de Buenos aires, SUMA, 2018

 


LA COMA Y EL PUNTO

La COMA Y EL PUNTO ×la dificultad está marcada con * (asteriscos). REPONGA PUNTOS Y COMAS Tenga en cuenta que donde está elidido (aus...